En la correspondencia del pintor, recopilada en sus cartas a Theo, se encuentran algunas de las razones por las que sufrió tal percance aquella noche en la famosa casa amarilla de Arlés.
De sobra es conocido el hecho de que Vincent van Gogh perdió una de sus orejas en la ciudad de Arlés en la que vivía con su colega Paul Gauguin. Pero son varias las teorías de lo que pasó realmente en su casa de Arlés esa fatídica noche. Indagando en las cartas que mantuvo durante años con su hermano Theo, podemos descifrar y conocer un poco mejor cuál es la realidad y cuál la ficción que rodea a este hecho legendario, que representamos de la forma más bella posible en nuestro espectáculo teatral Forever van Gogh, producido por beon. Entertainment.
Todo ocurrió la noche del 23 de diciembre de 1888, después de una fuerte discusión con su amigo, el pintor Paul Gauguin con quien compartía su casa en Arlés. Según la versión inicial de la policía, fue hallado a la mañana siguiente al incidente, inconsciente a causa de la gran pérdida de sangre. Cuando el pintor despertó no recordaba nada de lo sucedido, y le faltaba la oreja izquierda.
Más de un siglo después ese episodio sigue siendo uno de los más conocidos de la historia del arte moderno. Pero además de esta versión oficial hay distintas versiones muy contradictorias que circulan sobre el fatídico suceso.
La que mayor eco tiene es la de que fue Paul Gauguin quien durante la discusión empleó un sable (era buen esgrimista) y en la acalorada discusión antes de abandonar la casa le mutiló gran parte de la oreja. Según esta teoría lo que Vincent van Gogh hizo fue rematar la faena llevado por el odio y la ansiedad del momento. Y para darle forma completa a esta versión parece ser que el pintor decidió no denunciar porque el daño hacia su amigo Gauguin habría irreparable.
La casa de Arlés en la que ocurrió todo es la famosa Casa Amarilla que aparece en tantas obras de su colección. En aquella época (que en realidad duró el resto de su vida) el pintor era un genio fracasado que vivía mantenido por su hermano Theo.
La idea original era transformar esa casa en una especie de hermandad de artistas que vivieran y produjeran juntos, pero el único que se apuntó a la idea fue Paul Gauguin. Y apenas vivieron juntos dos meses, tiempo más que suficiente para que las tensiones estallaran.
Para entender el momento, anímicamente hablando, esos días Vincent van Gogh recibió una carta de su hermano Theo anunciándole que se iba a casar con Johanna Bonger.
El pintor vio peligrar su futuro, el cariño y dedicación de su hermano, impactando esta noticia brutalmente en su ya delicada salud mental.
En sus declaraciones a la policía Paul Gauguin dijo haber mantenido una fuerte discusión con Van Gogh, que estaba especialmente alterado y, además, ebrio. Paul le comunicó su deseo de abandonar la casa a lo que Vincent respondió amenazándole con una navaja de barbero. Según Gauguin, cuando abandonó la casa fue cuando van Gogh se cortó la oreja izquierda en un ataque de ansiedad.
La vox populi añade que el pintor se vendó él mismo la cabeza y se fue a un burdel con su oreja mutilada envuelta en un pañuelo ensangrentado a regalarle su oreja cortada a una prostituta llamada Rachel. Pero esta historia se desvanece en parte cuando la historiadora del arte Bernardette Murphy, en sus investigaciones, descubrió que la tal Rachel no era más que una limpiadora del burdel y amiga del pintor, lo que hace dudar seriamente del conjunto de la historia.
Lo que sí parece cierto es que cuando la policía lo encontró le llevó al hospital, donde estuvo ingresado varias semanas. Al regresar, pintó sus famosos Autorretratos con la oreja vendada. Sobrecogedora imagen sin duda.
Después de este episodio fue ingresado en otras 3 ocasiones en diferentes hospitales y la última de ellas por petición propia. Nunca se recuperó.
Pero su muerte es una incógnita aún más inquietante. ¿La teoría oficial? Que hizo un amago de suicidio y murió al día siguiente de infringirse la herida. La no oficial, y cada vez más firme, es que se trató de un disparo fortuito por parte de un adolescente que jugaba junto a su hermano con un arma en el bosque (ya habían herido a más gente en anteriores ocasiones).
Van Gogh murió el 30 de julio, como un artista incomprendido, sumido en el anonimato y con más de 900 obras a sus espaldas. Su relación con su hermano Theo fue tan profunda que este murió a los pocos meses de morir su hermano.
Hoy descansan en dos tumbas paralelas cubiertas por la hiedra del jardín de la casa de Theo.
Si vives intensamente, como hizo este fascinante pintor, no te puedes perder el espectáculo teatral inmersivo sobre la extraordinaria vida de Vincent van Gogh, que estará en el Teatre Apolo de Barcelona.