El autor de El Médico, Noah Gordon, se enamoró de nuestra tierra tras visitar ciudades como Toledo, Sevilla o Barcelona.
Noah Gordon hizo de su última novela, La bodega, una carta de amor a España, país del que alabó especialmente el buen vino, el jamón ibérico y cierta magia que tenemos en España a la hora de vivir. Y es que quizá a otras cosas no, pero al buen vivir no nos gana nadie.
Noah Gordon encontró en España uno de los pilares en los que se apoyó el despegue de su novela más aclamada en habla hispana: El Médico. Él mismo, en numerosas entrevistas, afirmaba estar felizmente sorprendido por la acogida de los lectores españoles. Por otro lado, se trata de la que consideraba su obra favorita de las que escribió. Gordon contaba que, cuando terminó de escribirla, se dijo: “ojalá piensen que es tan buena como yo creo que es”.
El Médico transcurre en el siglo XI (y con “cameos” de algunos personajes históricos de gran relevancia) narrando el periplo de Rob J. Cole, un joven con un don para sanar a los demás y plantar cara a la muerte, a través del ejercicio de la medicina. Es considerada una novela de gran expresividad y precisión histórica, además de ser portadora de valores fundamentales como la perseverancia, la amistad y la práctica de la moral en la medicina.
Valores que no vieron en su momento en Estados Unidos, ya que mientras Noah Gordon causaba sensación en España e Italia, en su país de origen era poco conocido. También es cierto que entonces la moda estadounidense era leer a autores como Paul Auster o Stephen King, que tenían más protagonismo en aquellos años de principios de los 90.
La relación de Noah Gordon con España es especialmente íntima, pues fue en nuestro país donde conoció a la que fue su editora muchos años, concretamente en Cataluña. Desde que conoció a Blanca Rosa Roca, fue su editora (y amiga) durante el resto de su vida. De hecho, al caducar los derechos de El Médico, decidieron crear asociados un nuevo sello editorial independiente.
Para escribir sus últimas obras, El último judío y La Bodega, Noah Gordon visitó ciudades españolas como Sevilla, Toledo o Barcelona, donde se terminó de enamorar definitivamente de Sant Jordi y sus tradicionales regalos (la rosa y el libro habitual). Gracias a esas visitas pudo describir con precisión los ambientes de esa Europa medieval, y los colores, sabores y olores que fueron el caldo de cultivo de lo que es hoy España.
Y este vínculo especial explica en gran medida la puesta en marcha de nuestro musical El Médico, un hito entre los musicales españoles, en cuyo desarrollo Michael Seay Gordon fue una pieza fundamental. Fue a través de él que se puso en marcha el engranaje que nos llevó a estrenar una de las obras musicales más importantes de la década.
Según nuestro compositor Iván Macías, Noah Gordon, ya bastante mayor, le dedicó 5 minutos de su tiempo y él, sin dudarlo, decidió que usaría ese escaso y precioso tiempo para hablarle desde el idioma más universal y humano del que disponemos.
Se sentó frente al piano de Noah Gordon, e interpretó sus fragmentos favoritos de la partitura para El Médico, en la que ya había empezado a trabajar. Para su sorpresa, el autor reconoció a la perfección a qué partes del libro pertenecía cada pieza. Al cabo de esos 5 minutos, Noah Gordon le dijo a Iván Macías: “los derechos son tuyos”.
A partir de ese mágico encuentro, beon. Entertainment pone en marcha el primer gran musical basado en el best seller internacional de Noah Gordon, y lo corona cosechando un gran éxito de crítica y público.
Al contrario de lo que ocurrió con su adaptación al cine, que nunca agradó a la familia, los Gordon asistieron al estreno de El Médico y Michael, posteriormente a la muerte de su padre, ha acompañado, como espectador, la gira del musical en muchas de las ciudades donde se ha representado. Michael Gordon se ha declarado públicamente un auténtico fan del musical que ahora vuelve a ponerse en marcha en el Teatre Apolo de Barcelona.
Sin duda disfrutarán de este extraordinario viaje.